La Comisión Coordinadora del Sistema Nacional de Educación Pública (CCSNEP) emitió un comunicado en el que reafirma los conceptos emitidos hace algo más de un año, sobre el proyecto de Ley Orgánica, que crea la Universidad de la Educación.
En el documento, la CCSNEP “reafirma la necesidad de la coordinación entre los entes educativos existentes y los que puedan crearse, la que deberá basarse en la estrecha cooperación entre todos los componentes del SNEP y en disposiciones legislativas específicas.”
Además, “subraya en particular la importancia de que la nueva institución universitaria se construya apoyándose en la colaboración entre ANEP-CFE y UDELAR, que viene expandiéndose sostenidamente.”
En este sentido, “afirma, en especial, que la construcción de la Universidad de Educación debe aprovechar la conjunción de tradiciones institucionales en el sentido establecido por la declaración conjunta ANEP-UDELAR de 2008 que al respecto dice: “La Administración Nacional de Educación Pública posee una valiosa tradición en materia de formación didáctico-pedagógica de los docentes de los diversos subsistemas que conforman la educación pública; la Universidad de la República posee, por su parte, una vigorosa tradición en materia de investigación disciplinaria y una incipiente pero prometedora investigación en materia educativa. Dada esta realidad, es vital elaborar alternativas que sepan conjugar ambas tradiciones”.”
La Comisión resalta que la creación de la Universidad de Educación tiene que constituir una contribución sustantiva al proceso de transformación de la educación pública, para lo cual deberá recoger las mejores tradiciones educativas nacionales y, al mismo tiempo, deberá pensarse con vocación de innovación y cambio de cara a la educación del futuro.
En el comunicado emitido, enfatiza que “la construcción de la Universidad de Educación no debe acentuar la centralización montevideana sino que, por el contrario, tiene que contribuir activamente a la descentralización y regionalización de la educación pública, promoviendo el protagonismo de los territorios y la coordinación con las otras instituciones terciarias públicas, incluso abriendo vías para la colaboración en sedes conjuntas (campus)” y “considera esencial señalar el pleno acuerdo de esta CCSNEP con el carácter autónomo e integralmente cogobernado que ha de tener la nueva institución en el marco de lo que debe ser en el Uruguay una institución educativa pública de carácter universitario.
Esto supone, en las antípodas de la autarquía, la autonomía conectada con la sociedad de una institución activamente comprometida con la defensa de los derechos humanos y la solución de los problemas colectivos. Asimismo implica enfatizar en las dimensiones colectivas de la conducción institucional y en el valor educativo de la participación amplia.
Finalmente, reafirma que “el conjunto de la educación pública nacional requiere cambios estructurales profundos, que contribuyan al avance hacia un país de aprendizaje, con capacidades innovadoras, dinamismo productivo, justicia social, mejores condiciones de vida y amplia participación democrática.”